Control de la calidad del agua
Cal y dureza del agua
Además de otros ingredientes nocivos, el agua dulce también contiene tierras alcalinas, a menudo denominadas “dureza”. También estamos familiarizados con esto por los depósitos en el hervidor de agua o la cafetera. Una capa de cal de solo 1 mm puede reducir considerablemente la transferencia de calor por el lado del agua. Esto puede provocar daños importantes, sobre todo en los componentes sometidos a grandes esfuerzos térmicos, como el tubo de llama o la placa tubular de la cámara de inversión interna .
En este caso, el sistema de ablandamiento existente se ha sobrecargado sistemáticamente por los consumidores adicionales de la planta. No había ningún control de la dureza por lo que no se detectó la sobrecarga. Como consecuencia, la dureza residual también fue a parar a la caldera, en la que se habían formado capas en el lado del agua. Estas capas redujeron la transferencia de calor, lo que a su vez provocó un sobrecalentamiento local y grietas en la placa tubular entre los orificios.
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¿Sabías qué...? Con una dureza del agua de 10° dH (dureza media), se transportan hasta 70 g de cal por m3 de agua. Si se extrapola este valor para una caldera con una producción de vapor de 10 t/h que funcione de forma continua durante 10 días, el resultado son casi 500 kg de cal en la caldera. |
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Problema: |
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Entrada de materias extrañas en el condensado
Desde el punto de vista de la energía y el rendimiento, tiene sentido devolver al circuito de agua/vapor el condensado que se acumula durante el funcionamiento. Sin embargo, puede contaminarse durante el proceso de producción. En este ejemplo, el condensado se ha contaminado con grasa debido a una fuga en el intercambiador de calor de producción. La grasa se depositó en la caldera, en las superficies de calefacción y también en el indicador de agua baja, lo que provocó el sobrecalentamiento de las superficies de calefacción.
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